El mundo de la curiosidad también llega a los epitafios. Disfrutad de estas sentencias tan llamativas:
Groucho Marx: «Disculpe que no me levante, señora».
En una tumba del cementerio de Salamanca: «Con amor de todos tus hijos, menos Ricardo que no dio nada».
Lo puso un marido en la tumba de su suegra: «Aquí yaces y yaces bien, tú descansas y yo también».
En la tumba de Miguel de Unamuno: «Sólo le pido a Dios que tenga piedad con el alma de este ateo».
En la tumba de José Solís Ruiz: «Aquí se puede ser ministro de cualquier cosa, menos del "movimiento"».
En el cementerio de la Almudena de Madrid: «Aquí estoy con lo puesto, y no pago los impuestos».
En Viareggio, en la tumba del célebre transformista Leopoldo Fregoli (fallecido en 1936): «Aquí, Leopoldo Fregoli llevó a cabo su última transformación».
En un cementerio de Minnesota: «Fallecido por la voluntad de Dios y mediante la ayuda de un médico imbécil».
En la tumba de un avaro: «En cuanto murió, se peleó con los santos, enfadado porque debía el alma y no podía venderla en dinero contante y sonante».
Inscripción en la puerta de un cementerio catalán: «Levantaos, vagos, la tierra es para quien la trabaja».
Lo puso el difunto en la lápida unos días antes de morir: «Por fin dejé de fumar».
En la tumba de un ludópata en lugar de poner R.I.P., ponía: «GAME OVER».
en el mio kiero k ponga: "fallecida xk tanta belleza no puede caber en est mundo" jejeje
ResponderEliminaryo pondria en mi tumba, "aqui llace un hombre que estaba hasta los cojones de pagar impuestos, aver si en esta otra vida hay que pagar alguno menos"
ResponderEliminarCuando pase unos 30 años de mi vida a lo mejor tendré más claro lo que poner en mi tumba. Me queda mucha vida todavía jejejeje
ResponderEliminarhay gente mas rara por el mundo
ResponderEliminarPero es una forma muy original de poner tu sello en la tumba.
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